Nos quedan solo unas horas, así que escucha con atención. Si estásoyendo esta historia, ya corres peligro. Mi hermana Sadie y yo podríamos ser tu única esperanza.Todo empezó en Londres, la noche en que nuestro padre hizo explotar elMuseo Británico con un extraño conjuro. Fue entonces cuando nosenteramos de que, además de un reconocido arqueólogo, era una especie demago del Antiguo Egipto. Rodeado de valiosas antigüedades, empezó aentonar extrañas palabras... Algo debió de salir mal porque la salaquedó reducida a escombros, Set, el dios del caos, apareció de la nadaenvuelto en llamas y a nuestro padre se lo tragó la tierra...No puedo decirte nada más, el resto deberás descubrirlo tú.