En varias casas de Sevilla se han producido una serie de robos que preocupan a toda la ciudad. El ladrón, al que apodan «Chopin» porque siempre deja una partitura del famoso compositor para firmar el robo, se lleva dinero, joyas y diferentes artículos de valor. Una noche aparece un cadáver en el salón de una de esas viviendas y la tensión aumenta.