La protagonista, trasunto de la propia autora, relata y desgrana una etapa de soledad, marcada por una ruptura sentimental y la marcha de sus hijos, cada uno a un destino que no puede visitar. En el transcurso de estos meses, acompañada tan solo por sus dos gatos, la escritura se convertirá en el único acto de resistencia posible frente a la adversidad. Repasará los momentos clave de su existencia, vistos desde una óptica obligadamente distinta, en la que una mujer -que es también hija, madre y amante- se convertirá en una mentirosa. La desobediencia será la luz que alumbrará su camino. El tiempo se detuvo, pero las emociones siguieron impulsando las horas. Una mujer y dos gatos. Un grito desgarrador sobre un final, que se convierte en un principio.