La sociedad del espectáculo es uno de los retratos más agudos, despiadados y penetrantes de la sociedad contemporánea de cuantos se han hecho hasta hoy y constituye la obra fundamental de Guy Debord (1931-1994), quien a su vez ha sido el principal agente de un movimiento de agitación cultural conocido como situacionismo, que planteó algunas de las propuestas más radicales, tanto en el terreno de la política como en el de la cultura, de las que se han sostenido en Europa después de la Segunda Guerra Mundial. Voluntariamente alejado del mercado de las modas intelectuales, su obra, a pesar de haber tenido una divulgación escasa o irregular, no ha dejado de ejercer una importante aunque a veces secreta o silenciada- influencia en los debates de nuestro tiempo. Su vocación de clandestinidad y su intransigencia frente a los totalitarismos le llevaron a elaborar una teoría crítica que hoy, en pleno imperio de lo político y culturalmente correcto, ha vuelto a cobrar una merecida e intempestiva actualidad.