«La mirada, el entendimiento, requiere y exige libertad. Fruto de esalibertad fueron la ciencia, la filosofía, la tragedia, la lírica, laépica, la política, la historia, la comedia, la ética..., todos esoscampos que inventaron los griegos y por donde empezaron a sembrar lassemillas y en muchos casos los grandes árboles que hoy, casi sin saberlo, nos cobijan y alimentan.» En este maravilloso libro nos reencontramos con un Lledó combativo yelegante que, movido por un ideal de decencia, justicia e igualdad, nos invita a recuperar nuestra capacidad de mirar. Este conjunto de textos habla del poder liberador del mito en losantiguos griegos (frente al efecto de otro tipo de mitos, «impuestos porlos profesionales de la mentira»), de la fuerza de Eros, de la invenciónde la armonía musical, de Epicuro según el autor una de las figuras másatractivas y misteriosas de la historia del pensamiento , de la difícilbelleza helénica y de otras enseñanzas clásicas de las que somos deudores. Nos habla también de cómo esa mirada fuera de los marcos que nosenseñaron los grandes pensadores es el necesario primer paso paracombatir los males que impregnan nuestra vida, como el lenguaje vacío ymanipulado, la desmemoria, la «nueva teología» de la tecnología y laspantallas y una educación «entontencedora» e incapaz de promover el verdadero conocimiento y la libertad intelectual. La crítica ha dicho:«Si hubiera muchos intelectuales como Lledó el nuestro sería un país bien distinto.»ELVIRA LINDO