A veces el tiempo nos juega malas pasadas. Sobre todo cuando se vuelve loco y, en lugar de correr hacia delante, se empeña en ir hacia atrás. Gona viaja al pasado para arreglar una pequeña cuenta pendiente. Lo hará en compañía del lector y sirviéndose de un viejo cacharro de su invención que ha convertido en vehículo interespacial. Un revólver con la firma de El Coyote, el legendario forajido del Oeste, tiene la clave para arreglar las cosas sin demasiadas consecuencias. Pero encontrar al personaje no será fácil.