Stacey y Mary Anne están muy contentas porque se van a la playa con los Pike para ayudarles con sus ocho hijos. Sea City está genial: una casa a pie de playa, un paseo marítimo lleno de tiendas, sol, arena... ¡Y Scott!, el crush de Stacey, el socorrista más guapo del mundo, del que está enamorada. Se pasa el día buscando excusas para acercarse al puesto de los socorristas, lo que significa que Mary Anne tiene que hacer el trabajo de las dos. Y, claro, está harta.