Cisco García tenía una vida envidiable: trabajaba como abogado, estaba enamorado de su pareja, viajaba mucho, tenía una vida social muy activa... y todas las Navidades se iba con sus amigos a Austria para comenzar el año haciendo snowboard, su pasión. Fue en uno de esos viajes cuando un mal salto lo cambió todo. Tenía treinta y tres años.
Cuando despertó en el hospital, supo que su vida había cambiado para siempre: el accidente le había dejado en silla de ruedas. Cualquiera se habría venido abajo, pero él no. Decidió que no iba a dejar que un obstáculo le hundiera y, en cuanto pudo, cambió el snowboard por el tenis y se dedicó a entrenar hasta convertirse en uno de los mejores jugadores de tenis en silla de ruedas del país.
Ahora, cinco años después, Cisco cuenta en este libro toda su historia y comparte sus reflexiones y los aprendizajes que ha obtenido a lo largo de toda su vida y que le han ayudado a superar los momentos más difíciles.
Porque, como él mismo dice, no hay que huir de las dificultades, hay que enfrentarlas, y entender que las cosas requieren tiempo y esfuerzo. En la vida nos sucederán cosas que serán maravillosas y otras que no, todo forma parte de la experiencia. Lo importante es la actitud que mantengamos. Que nos levantemos después de caer. Que abracemos la vida tal como nos viene, buscando siempre la manera de salir adelante.