".Cada lector se fabrica su propia, intransferible y heterogénea antología personal. Yo, como lector, he hecho esta mía, quizás más discutible que ninguna, procurando distanciarme de aquel que escribió estos versos. ese alguien que, aunque tan cercano de mí como pueda estarlo mi sombra, jamás he podido confundir conmigo. Que tampoco se confunda el lector. Quien habla en los poemas, sea quien sea, tiene por lo menos algo claro. Yo mismo, muy al revés del hidalgo manchego, no sé aún quién soy. Tal vez sólo la sombra de esa sombra que escribe los poemas. Esa sombra que busca su contrapeso de luz en la luz de la silente música del verso"..