Este libro abre las puertas a un mundo mágico en el que los dragones vuelan a la luz de la luna, vigilan tesoros, duermen en un castillo y viven en una cueva de cristal. Los niños decorarán las fabulosas escenas con más de 200 pegatinas, entre las que hay algunas muy brillantes para dar aún más intensidad a las ilustraciones. En cada página hay textos simples que enriquecen el vocabulario de los niños y les incitan a comentar los detalles de las escenas. Un regalo perfecto para cualquier pequeño fan de los dragones y las criaturas fantásticas.