¿Los monopatines son solo para chicos? ¿Y los dinosaurios también? ¿Solo las chicas pueden cuidar bebés? ¿Las mujeres solo se pueden casar con hombres? Hay muchas cuestiones sobre la identidad de género que, a menudo, damos por hecho. Pero ¿quién hizo estas normas? ¿De verdad es necesario seguirlas? Este álbum ilustrado trata de enseñar a los más pequeños que otro mundo es posible: uno en el que todos estemos en igualdad de condiciones y seamos amados y respetados, sin importar quiénes seamos, cómo seamos o cómo nos sintamos.