«En Las Vegas, el tiempo se congela entre fiestas y casinos». Y por eso no es sorprendente que MEREDITH vaya a ir, aunque sí que lo es su propuesta. AVA no puede dejar de pensar que ahí hay algo extraño, por más que CONNOR intente tranquilizarla y que LILY no desconfíe porque lo único que quiere es no pensar en TOM ni FINN ni XIMENA ni JASMINE, puesto que lo que ha pasado es horrible, atroz, y ¿por qué OLIVER no puede limitarse a desaparecer de su vida, como parecen haberlo hecho MARTHA y REX? NATE, sin embargo, diría que las personas desaparecen demasiado rápido en comparación con la huella que dejan. ¿O acaso no es así, JORDAN? Pasar el invierno en Las Vegas podría ser una buena forma de distanciarse. Pero cuidado: en una ciudad donde todo el mundo lleva máscaras, la de alguno puede acabar eclipsando su verdadero rostro.